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         El Mercedes-Benz 600 con techo solar, también conocido como W100, era un vehículo de última generación fabricado por Daimler-Benz durante las décadas de 1960 y 1970. Este elegante vehículo fue utilizado en todo el mundo por y para las altas esferas. Sirvió como un epítome de perfección, tecnología de punta, comodidad, exclusividad y singularidad. El Pullman fue y sigue siendo el turismo más grande de la posguerra.

Además del uso patrocinado por el Estado, celebridades internacionales de la política, los negocios, la aristocracia y el mundo del espectáculo también eligieron poseer y viajar en un Mercedes-Benz 600 con orgullo. El "Gran Mercedes" debutó en la Internationale Automobil-Austellung (IAA) de Frankfurt en septiembre de 1963. Se ofrecieron varias ediciones, incluidas Pullman Limousine, Pullman Sedan y Pullman Landaulet.

La berlina de cuatro puertas tiene casi dos metros de ancho y 5,54 metros de largo, mientras que la berlina Pullman de seis puertas tiene una majestuosa longitud de 6,24 metros. La tercera versión es un Pullman Landaulet descapotable. Cuenta con un techo fijo sobre el conductor/chófer en la parte delantera y un techo convertible abatible en la parte trasera del habitáculo. Había dos versiones del Landaulet disponibles, una con capó trasero largo y otra con capó corto.

En la parte trasera del Pullman clásico se dispusieron dos filas de asientos. En la versión larga de seis puertas se podía seleccionar una fila central de asientos abatibles. Estaba destinado a clientes que viajaban con personal o guardaespaldas.

Los vehículos estaban propulsados ​​por un motor de inyección V8 con una cilindrada de 6,3 litros y una potencia de 250 CV. Así, la limusina de 2,6 toneladas era capaz de alcanzar una velocidad máxima de hasta 205 km/h. En su mejor momento, el 600 Pullman era el sedán de producción más rápido del mundo.

El confort de los vehículos se vio reforzado por la suspensión neumática, un completo servosistema hidráulico, un sistema de calefacción y ventilación con ajuste eléctrico, aire acondicionado, asientos con ajuste hidráulico, elevalunas hidráulicos y techos corredizos. En cuanto a la decoración interior, el cliente pudo elegir entre diferentes acabados en maderas preciosas y el más fino velour o cuero para el revestimiento interior. También había una barra en la parte trasera con nevera, teléfono para el coche y mampara retráctil.

Con este coche de lujo, Daimler-Benz causó un gran revuelo entre la élite internacional y, durante décadas, el 600 Pullman fue un referente único en su clase.