Cuando se habla de trenes eléctricos en la Argentina no se puede obviar el nombre de Roberto Milou. Roberto siempre fue reconocido por su especial educación y corrección en el trato hacia todos los ferromodelistas y aún hacia sus colegas. Aquí está mi pequeño homenaje:

Se inició en el mundo del hobby a los 17 años comprando y vendiendo trenes Lionel. Junto a un socio comercializaban Trocha 0 y 027 usados en su casa del barrio de Belgrano situado en Jorge Newbery 2560.

En 1955 decide cambiar de rumbo y entra a trabajar con Raldúa en el sector de Ferromodelismo. Se desempeña como empleado y después de 5 años consigue su confianza. Allí adquiere una experiencia invalorable que le resultaría decisiva para los años futuros. Tal es así que su mismo jefe le aconseja independizarse y formar su propio comercio, algo bastante inusual para estas épocas. Realiza una inversión bastante importante y se instala en su negocio actual ubicado en Libertad 948 al tiempo que su ex jefe lo ayudaba pasándole su clientela.

En esos tiempos las principales ganancias provenían de la venta al menor de Trix Express, Lima, Automodelismo y Scalextrix. Además amplió el comercio con militaria, aviones a escala, barcos y plastimodelismo.

En "La Apertura de la Importación" en Martínez de Hoz, incursionó con la juguetería convencional para luego volver a lo original de su profesión: el hobby de varones.

En 1989 obtiene la Representación de Märklin, la más prestigiosa marca de ferromodelismo en el mundo, recomendado personalmente por la Sra. Teresa de Boschi, viuda de Edgardo Boschi, dueño de Minimodels. Al lograr semejante exclusividad, le dio al local un nivel que lo convirtió en uno de los más exclusivos de Buenos Aires. Trabajó con Märklin desde 1989 hasta el 2004, año en el que le transfiere la marca a Maxifun Hobbies debido a su amistad con el dueño, el Sr. Muradian.

Roberto Milou se presentó en numerosas exposiciones, programas de televisión, charlas para diarios, radio y revistas de hobbies; por ejemplo en "Sábados Circulares de Mancera"(foto). En televisión apareció con Jorge Neustadt y Horacio de Dios con "La Fraternidad".

Es justo mencionar a su esposa de fierro Julieta, siempre a su lado en el negocio y en la vida. Atiende invariablemente con la misma pasión y me animo a decir que en algunas cosas quizás entendía más que Roberto. Por eso se ganó el título indiscutido de "la mujer que más sabe de hobby".

Usualmente el habitante de la ciudad de Buenos Aires, cuando le hablan de tren eléctrico, asocia inmediatamente a "aquel local de la Galería en la calle Libertad, con la vidriera de promoción que da a la calle y con un tren en movimiento" o "aquel negocio que tocabas el botón y andaba el tren". Esta es la impronta que dejó Roberto: nos enseñó como mostrar, asesorar y vender su pasión a los hobbistas (lo que ahora se llama marketing).

Te retenemos siempre en nuestra memoria tus amigos del Hobby.